“El feminismo está aquí para quedarse”

Como el tema es muy amplio y da para mucho, nos marcamos una charla a tres bandas para poder hincarle mejor el diente a algunas cuestiones. Así, hablamos en primer lugar con Tamia Morales de la revista Píkara, proyecto que tras once años de historia a sus espaldas se ha convertido, sin duda, una referencia del […]

Mar 29, 2022

Como el tema es muy amplio y da para mucho, nos marcamos una charla a tres bandas para poder hincarle mejor el diente a algunas cuestiones. Así, hablamos en primer lugar con Tamia Morales de la revista Píkara, proyecto que tras once años de historia a sus espaldas se ha convertido, sin duda, una referencia del periodismo feminista y autogestionado en el Estado español. Ellas mismas definen el periodismo que ejercen como de calidad, con perspectiva feminista, crítico, transgresor y disfrutón. Y les acompaña Carmen V. Valiña, de Periféricas, una escuela de feminismos alternativos que ofrece cursos online y formaciones personalizadas, que prestan especial atención a las luchas por los derechos de mujeres que han sido más invisibilizadas.

Reflexionamos con ellas sobre el momento de gran ebullición en que se encuentran los feminismos, como quedó patente en la jornada de lucha del 8 de marzo, repasando los cambios y desafíos de los últimos años, haciendo balance de ellos. Como valora Tamia, en los últimos años ha sido significativo el aumento de medios online que abordan contenidos con perspectiva feminista, un aumento que ha ido parejo al del número de lectoras así como del conocimiento de éstas sobre feminismo. En estos años de trayectoria hemos estado trabajando en profesionalizar lo que hacemos, desde cómo se comunica hasta la gestión.

En este corto periodo de los últimos años que ha sido tan inteso en el ámbito de la formación, ha habido un creciente conocimiento de la terminología relacionada con el feminismo, conceptos como intereseccionalidad o empoderamiento que hace unos años quizás no estaban tan en la mesa, pero hoy en día casi todas las alumnas los conocen y parten de ello. Además, la generación más joven tienen una conciencia cada vez más clara de que el feminismo está aquí para quedarse.

Ambas coinciden en el desafío que supone el auge de la extrema derecha, junto a otros como la creciente diversidad cultural, religiosa… de España forma parte de se movimiento feminista y sin posiciones de superioridad de ningún grupo sobre otro.

Seguimos el diálogo de la mano de Mayu Serreau, de Mugarik Gabe Nafarroa, y Antonia Ávalo, Mujeres Supervivientes, dos proyectos que, desde diferentes territorios y enfoques, enlazan dos temas de interés: de un lado, la alimentación; de otro lado, el acompañamiento de mujeres en situaciones de vulnerabilidad. Mugarik realiza acciones de sensibilización para denunciar el sistema económico como principal causa de miseria y desigualdad en el mundo, con una perspectiva feminista y Norte/Sur. Mujeres Supervivientes, por su parte, sostiene un comedor popular en la plaza de Pumarejo de Sevilla, desde el convencimiento de que cortar cebolla es una valiosa herramienta pedagógica feminista.

Desde esta amplia perspectiva que dan estas procedencias, hablamos de interseccionalidad y procesos migratorios. Antonia reconoce que su condición de mujer migrante se debe a la “desigualdad norte-sur”, condición ante la que se articula con este comedor social para hacer de él “una apuesta por la vida, por las redes de solidaridad y de cuidados (..)” Y, ante la situación de hambre y precariedad, “juntamos un puñadito de lentejas, arroz, aceite, y empezamos a cocinar y cuidarnos. Pero también devenimos en una conciencia política decolonial, nuestra praxis política tiene que ver realmente con esa entrega amorosa feminista de no fijarnos si es una mujer migrante o Europea.”

Mayu nos apunta algunas estrategias para abordar estas cuestiones desde los movimientos feministas, invitándonos a revisarnos desde una perspectiva global y preguntarnos qué sustenta nuestros modelos de vida y consumo. Así mismo, nos invita a “romper con la idea de ‘inferioridad’ de los países del sur. No son vulnerables porque sí, porque tengan menos capacidades, sino que hay toda una serie de mecanismos que los empobrecen. Y ahí también hay que romper con la ‘jerarquía de saberes’. Podemos aprender muchísimo de estos territorios: allá todavía mantienen valores y modelos de vida sostenibles que quizás aquí hemos perdido.

Por último, hablamos con Col·lectiu Punt 6, un colectivo de profesionales del mundo de la arquitectura y del urbanismo que trabajan desde la perspectiva feminista. Y con Atelier Ideas, cooperativa que trabaja para la promoción de la igualdad desde diversas áreas como la del patrimonio cultural, tanto inmueble como inmaterial; realizando, entre otras cosas, archivos de memoria oral e inventarios de patrimonio arquitectónico.

Desde este urbanismo con perspectiva de género, Blanca Valdivia defiende que el espacio se ha configurado a partir de los valores de esta sociedad, que es capitalista y patriarcal, y por lo tanto todos los espacios, privados, comunitarios y públicos, son el escenario de las diferentes desigualdades por las que estamos atravesadas desde una perspectiva feminista interseccional, y a la vez la propia conformación del espacio reproduce estas desigualdades. Ante este mismo diagnóstico, Felix A. Rivas, de Atelier entiende el entorno como algo que construimos cada día y también nos construye, y desde ahí, tanto un territorio como el otro (en referencia a la clasificación de Lolita Chávez de ‘Feminismo comunitario- territorial’ que entiende el “territorio” como cuerpo y como tierra, ambos en disputa) “son espacios que se pueden vivir como espacios de cuidados pero también de reivindicación”, algo que recoge también Blanca al apuntar que “es básico romper con esta dicotomía de lo público y lo privado e incorporar esta perspectiva del espacio y la dimensión comunitaria como espacio de cuidados y organización social”.

Si quieres escuchar la conversación completa y otros debates como el papel de las empresas de la Economía Solidaria en el contexto de auge feminista, los cruces entre soberanía alimentaria y feminismos o qué horizontes de futuro pueden florecer de esta intensa labor de pedagogía feminista, dale al play a ‘Me Cambio‘ .